jueves, 17 de junio de 2010

La Cigarra y la Hormiga - FÁBULA II


Cantando la cigarra
Pasó el verano entero,
Sin hacer provisiones
Allá para el invierno.

Los fríos la obligaron
A guardar el silencio
Y acogerse al abrigo
De su estrecho aposento.

Vióse desproveida
Del precioso sustento
Sin mosca, sin gusano ,
Sin trigo y sin centeno.

Habitaba la hormiga
Allí tabique en medio,
Y con mil expresiones
De atención y respeto,

La dijo-Doña hormiga,
Pues que en vuestros graneros
Sobran las provisiones
Para vuestro alimento,

Prestad alguna cosa
Con que viva este invierno
Esta triste cigarra,
Que alegre en otro tiempo,

Nunca conoció el daño,
Nunca supo temerlo.
No dudéis en prestarme,
Que fielmente prometo

Pagaros con ganancias,
Por el nombre que tengo,
La codiciosa Hormiga
Respondió con denuedo

Ocultando a la espalda
Las llaves del granero:
Yo prestar lo que gano
Con un trabajo inmenso!

Dime, pues holgazana,
¿Qué has hecho en el buen tiempo?
 -Yo dijo la cigarra, A todo pasajero,
 Cantaba alegremente, sin cesar ni un momento.
-¡Hola! ¿Conque cantabas: cuando yo andaba al remo?
Pues ahora que yo como, baila, pese a tu cuerpo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario